El pailebote del Consell lleva más de 3 años atracado, sin navegar y pagando seguro
La réplica del histórico barco costó más de cuatro millones de euros y nadie sabe cuál será su futuro - Torrevieja abona 6.300 euros anuales por cubrir las contingencias de una nave que no es ni tan siquiera visitable
El velero Pascual Flores lleva tres años y medio atracado en el puerto de Torrevieja. Desde que se terminó en la primavera de 2008, la mayor parte del tiempo lo ha pasado atracado en la escollera del puerto pesquero, donde sigue, haciendo las veces de museo flotante -aunque no se puede visitar-. No ha llegado a navegar, pese a que el ayuntamiento anunciara su puesta de largo inminente en numerosas ocasiones durante este periodo. El municipio paga al año un seguro de 6.369 euros a Allianz. A ese gasto hay que sumarle las labores de mantenimiento que se realizan en el interior de la nave. La bella estampa del pailebote se puede contemplar como una pieza de la zona marítima del Museo del Mar y de la Sal, junto a la patrullera Albatros y el submarino Delfín.
Fue uno de los grandes proyectos del exalcalde Pedro Hernández, quien quería ver en la restauración del barco "el castillo" que a Torrevieja le faltaba, como patrimonio de la historia de los torrevejenses. Al tiempo de ser símbolo estaba perfilado también para ser insignia de la Comunitat Valenciana como buque escuela de la Generalitat.
Ese fue el compromiso del expresidente Francisco Camps en una ya lejana visita a la ciudad, en julio de 2004. En 2011 y de forma casi testimonial ese objetivo se ha visto reducido al uso por parte de alumnos del Instituto Marítimo de Alicante del velero para realizar prácticas.
Pese a que todas los indicios apuntaban a que surcaría el Mediterráneo poco antes de las elecciones municipales, lo cierto es que ha quedado anclado en el mismo lugar. El barco ha costado más de 4 millones de euros.
Fuente: Levante - EMV
Fue uno de los grandes proyectos del exalcalde Pedro Hernández, quien quería ver en la restauración del barco "el castillo" que a Torrevieja le faltaba, como patrimonio de la historia de los torrevejenses. Al tiempo de ser símbolo estaba perfilado también para ser insignia de la Comunitat Valenciana como buque escuela de la Generalitat.
Ese fue el compromiso del expresidente Francisco Camps en una ya lejana visita a la ciudad, en julio de 2004. En 2011 y de forma casi testimonial ese objetivo se ha visto reducido al uso por parte de alumnos del Instituto Marítimo de Alicante del velero para realizar prácticas.
Pese a que todas los indicios apuntaban a que surcaría el Mediterráneo poco antes de las elecciones municipales, lo cierto es que ha quedado anclado en el mismo lugar. El barco ha costado más de 4 millones de euros.
Fuente: Levante - EMV
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