Facebook confía a su comunidad de suscriptores la traducción de la red social
La compañía ha desarrollado una aplicación colaborativa - Unas 1.200 personas, seleccionadas por su dirección IP, han participado en la versión piloto en español, que se abrirá al público a finales de marzo
Facebook es "una compañía en crecimiento", dice su vicepresidente de estrategia, Matt Cohler. Creada en Harvard (Boston), se trasladó a Silicon Valley (California) cuatro meses después, en el verano de 2004. "Aquí hay un ecosistema de ingenieros, inversores y emprendedores único en Estados Unidos y probablemente también en el mundo", justifica.Cohler, que a sus 30 años ya había fundado la red LinkedIn, entró en Facebook en 2005. "Entonces eramos 7, hoy unos 400. Hemos crecido muy deprisa. Tratamos de mantener el espíritu del principio, aunque ahora el objetivo es la expansión internacional".
La primera meta está clara: abrirse a los idiomas del mundo. El método, también: una wiki de traducción colaborativa. Las versiones en español, francés y alemán estarán disponibles a finales de marzo. El resto, con el tiempo y la voluntad de los internautas. "Será la comunidad quien decida cuáles son los idiomas elegidos, sin excluir ninguno. Nosotros les damos la herramienta para que lleven a cabo la tarea", cuenta Javier Oliván, responsable de la internacionalización. El español añade: "No planeamos abrir sitios por países. Somos una plataforma de comunicación global. Son los abonados quienes decidirán en qué idioma la usan". Unos 1.200 suscriptores participan en el proyecto piloto en español, que aún no está abierto al público.
"Les seleccionamos por su dirección IP". Algunos provienen de España, otros de América Latina. "Unos traducen palabras, otros frases. Todos discuten cuál es el mejor término y votan por su preferido. El que más reúne sale elegido". Mediante algoritmos determinan cuando una palabra tiene consenso. "Es muy democrático", dice Oliván.
Abrirse a terceros
Cohler cree que dos aspectos explican el éxito de Facebook -actual niña bonita de Silicon Valley- entre las redes sociales. El primero, el uso de nombres reales. "Puede ser un detalle, pero afecta a cómo se usa. Te comunicas con la gente que te importa, esté en tu universidad, escuela o trabajo; gente que no crea otra vida paralela en Internet. Nos usan en su vida cotidiana, de manera similar al móvil o el e-mail".
En general, prosigue Cohler, "no hay diferentes comportamientos según la edad o procedencia. Sí hay detalles que cambian y por eso creamos una plataforma que permite a terceros crear aplicaciones específicas. Hemos detectado que algunas se desarrollan para otras culturas y países. Por ejemplo, en España el fútbol es importante. Pues existen algunas que hablan de las alineaciones de los equipos españoles". La plataforma, inaugurada en mayo, reúne 10.000 aplicaciones, sean para negocios, profesionales o simplemente para divertirse. Es la segunda clave de Facebook. Los desarrolladores ganan dinero mediante la publicidad y el comercio electrónico, siempre que el tráfico se mantenga en la red. Además, los abonados también pueden añadir sus aplicaciones y, cuando lo hacen, se notifica en los perfiles de su círculo en un claro componente viral.
Un año y medio después de abrir su registro a todos, el mundo es, según Comscore, la decimotercera página más visitada del mundo
De Sabiñánigo a Palo Alto
De Sabiñánigo (Huesca) a Palo Alto (California). Javier Oliván sólo lleva cinco meses en Facebook, aunque por la soltura con la que se maneja en bicicleta por Palo Alto, donde está la sede central de la compañía estadounidense, uno diría que lleva allí toda la vida.
"Recorro cada día varios kilómetros en bicicleta. Aquí no sólo se vive muy bien; aquí están los mejores talentos del mundo para resolver problemas tecnológicos. De momento no tengo intención de volver a España", asegura este ingeniero industrial y electrónico de 30 años.
Oliván llegó a la Universidad de Stanford hace dos años para hacer un master en administración de empresas (MBA). Había trabajado en el sector de la telefonía móvil durante los últimos cinco años: primero en Alemania con la empresa Siemens Mobile y después en Japón con la operadora NTT DoCoMo. "La telefonía móvil es un sector fascinante. Aprendí mucho en ambas compañías y te aseguro que no es tan diferente de Facebook. Al fin y al cabo, todo es comunicación".
Oliván está al frente del proyecto de internacionalización de Facebook. Por sus manos pasan los proyectos piloto en español, francés y alemán, y habla con entusiasmo de la iniciativa.
"Como compañía tecnológica que somos, lo hacemos de una manera innovadora, dejando que sea la comunidad de usuarios de Facebook quienes traduzcan el sitio". Oliván añade: "Hemos construido una aplicación, una wiki colaborativa, que permite traducir la plataforma en cualquier idioma del planeta. Si hay gente dispuesta a traducir en catalán, vasco o gallego, o incluso en suahili, pues adelante".