No money, no honey

Gijón, a punto de perder la autopista del mar que Vigo estrenará en octubre

Las subvenciones para la ruta entre el puerto asturiano y Francia se acaban

Mientras Vigo inicia la cuenta atrás para la puesta en marcha de su autopista del mar con Saint Nazaire -el compromiso de Fomento es que arranque en octubre-, Gijón está a punto de perderla con Nantes. LD Lines, la naviera que la gestiona ya no despacha pasajes para después del 16 de septiembre, fecha en la que rematan las ayudas públicas a la línea, tanto las del programa europeo Marco Polo como los gobiernos español y francés.

Dichas ayudas son el acicate que las administraciones, la primera la comunitaria, ofrecen a las navieras con el fin propiciar la retirada de cientos de camiones de las carreteras. Se entiende que cuatro años es tiempo suficiente para que las compañías que exploten las autopistas se garanticen los tráficos para rentabilizar el servicio. El problema en el caso de Gijón, según LD Lines, es que sin dinero público no le resulta rentable.

Lo curioso es que la autopista asturiana ha tenido cuatro años de ventaja con relación a Vigo. Pese a que ambas ciudades iniciaron el proceso de creación del servicio prácticamente al mismo tiempo, sucesivas trabas fueron retrasando la entrada en funcionamiento de la viguesa, lo que se consideraba un serio obstáculo a la hora de competir. A tenor del anuncio de LD Lines, que en estos cuatro años ha transportado unos 100.000 vehículos y 170.000 pasajeros, la realidad se está demostrando bien distinta.

Suardiaz, la naviera que desde el 13 de junio tiene los derechos de explotación de la autopista de Vigo, es también desde enero del 2013, la adjudicataria del tráfico marítimo de Gefco para Citroën, lo que le garantiza una carga mínima. En la actualidad realiza cuatro viajes semanales entre Vigo y Saint Nazaire -dos de ida y dos de vuelta-, aunque la idea es sumar un tercero en función de la demanda. El buque que realiza la línea, Suar Vigo, tiene capacidad para 1.200 coches.

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